De la calidad y la creatividad

  Es llamativo como en estos tiempos podemos ver que los estándares de calidad han disminuido notablemente. es decir que hablamos de que algo es bueno cuando apenas cumple con la cuota de lo que es correcto.
                    Esto puede deberse a dos factores, el conocimiento del que juzga es muy escaso o bien no conoce algo que realmente sea de buena calidad no tiene un parámetro donde comparar o bien, no sería nada raro, que él mismo no tenga criterio para saber que es de buena calidad y que no.
                    Esto es algo muy común en nuestra profesión fotográfica, en reiteradas ocasiones escucho hablar a alumnos de los cursos iniciales que comentan que tal fotógrafo es bueno o que aquel es muy bueno, lo cual despierta mi interés en ver parte del trabajo de ese fotógrafo. Lamentablemente al ingresar a su página web o ver sus fotos me encuentro con un trabajo correcto, (lo cual no hace que sea precisamente bueno, sólo correcto). Son fotos que están bien expuestas, bien encuadradas y en foco, condiciones indispensables para que una fotografía sea correcta, es lo mínimo que pide el arte fotográfico.
                    De alguna manera, quizás sin darnos cuenta, estamos denigrando a la fotografía, nuestra profesión, aquello que amamos y nos da de vivir (lo cual no es poca cosa), estamos nivelando hacia abajo, estamos estableciendo un estándar de mediocridad en un arte como es la fotografía.
                    Cuando hablamos de CALIDAD, no podemos quedarnos en lo básico y elemental que constituye una fotografía correcta (bien expuestas, bien encuadradas y en foco), es como decir que un auto es muy bueno porque anda y nos lleva de aquí para allá.  
                    Calidad según la “Real Academia Española” es: Propiedad o conjunto de propiedades inherentes a algo, que permiten juzgar su valor. O también: Dicho de una persona o de una cosa: Que goza de estimación
general. Es decir que cuando hablamos de calidad y sobre todo de buena calidad es cuando el producto que generamos tiene características que son inherentes (propias) que lo distinguen de otro por ser mejor y lo ubican
dentro de un nivel de cosas que gozan de la buena apreciación de aquellos que tienen autoridad (conocimiento) para juzgarlo. 
                    
                     Aquí es donde empiezan a jugar otros parámetros en la confección de la imagen, el punto de vista la calidad de la iluminación (desde donde iluminó, como y con que), la óptica elegida para hacer la toma, el lugar, el fondo, etc. Pero, además, una decisión fundamental de nuestra parte que es: capacitación y un deseo de trabajar con excelencia.                         
                    En definitiva nos vemos obligados a que aflore la CREATIVIDAD, pero para ellos debemos involucrarnos en lo que hacemos, debemos personalizar nuestros trabajos no hacerlos en serie, ese es el problema de las modas, “inclino la cámara para acá, para alla, uso el enfoque diferencial para tener poca profundidad de campo, todo lo hago con gran angular, no uso el flash, etc”. Cuando no contamos con una formación sólida en conocimiento que trasciendan meramente lo técnico (lo cual es fundamental conocer a fondo), estamos limitados para saber como involucrarnos que buscar, como sentir y palpitar lo que estamos haciendo, como representar en imágenes las emociones, las sensaciones de esa persona o el mensaje que se queremos dar a través de las fotos que hacemos; entonces copiamos, lo cual no está del todo mal siempre y cuando sea un disparador de ideas y no una constante de mi trabajo, vemos que hace otro y si es lindo y varios lo hacen así, lo adoptamos. El problema es que muchas veces eso no se adapta al trabajo que tenemos que hacer, no representa lo que el cliente es, pero como no tenemos criterio para interpretar trabajamos en serie, hacemos siempre los mismos equemas.
                     Algunos se refugian en el famoso pre-concepto de “me gusta - no me gusta” como si esto fuera suficiente mérito para juzgar la creatividad y por ende la calidad.
                     La creatividad será tema de otro artículo por ahora es importante que entendamos que uno de los propósitos de la creatividad es generar un producto original, único, que no halla existido antes o que lo hallamos modificado mejorandolo y estableciendolo como nuevo. Podemos tener una línea de trabajo creativa, no es algo privativo o, para algunos elegidos, pero para eso debemos buscar capacitarnos integralmente en lo relacionado a nuestra profesión y no sólo ver lo que hacen otros para copiarles, porque a ellos les da resultado.

Si seguimos haciendo lo que siempre hemos hecho, continuaremos obteniendo los mismos resultados que hasta ahora. Para obtener resultados diferentes, tenemos que hacer cosas diferentes.
Albert Einstein.

Estas son algunas direcciones de fotógrafos creativos:

http://www.quierosercreativo.com/18-fotografos-con-talento/

http://www.xatakafoto.com/fotografos/chema-madoz-creatividad-en-estado-puro

Hasta la próxima.
Gustavo Pomar